Un instante es más largo de lo que parece, es cómo una lágrima que recorre la mejilla en pocos segundos, esa lágrima no es un instante, es un conjunto de sentimientos o situaciones que generan esa necesidad de llorar.
O cómo cuando nos acostamos, parpadeamos y ya nos suena el despertador para empezar un nuevo día. En realidad han pasado horas, incluso hemos completado varios ciclos de sueños, pero para nosotros a sido tan sólo un instante.
Incluso todo lo pasado parece un breve momento, si echamos la mirada hacia lo vivido parece que todo a sido un instante, que el tiempo se escapa por cada poro de la piel, y con el tiempo también la vida.
Cuando se crea vida, en muchas ocasiones es sólo un instante, pero en realidad ese instante es casi tan largo como nuestra vida, ya que para crear vida antes tenemos que empezar la nuestra, crecer, y unir dos caminos diferentes en uno. Con el destino de crear una familia.
En resumen, los instantes son una mala interpretación de los momentos vividos, nada es eterno y nada es un simple parpadeo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario